Me llamo Magdiel, y soy un Ángel caído. Soy uno de los elegidos de Lucifer y vuelvo a ser libre en el mundo. Estuve aquí cuando se creó este lugar, y aquí seguiré cuando sea destruido. No soy Anila Kaul, aunque me parece bien ser ella hasta que pueda comprender este mundo y encuentre mi lugar en él. Cuando parezco humana, soy mucho más que eso. Este cuerpo solo contiene una de mis facetas, una simple extrusión de algo mucho mayor. Existo desde el principio de los tiempos, y he visto cosas que la mera mente humana no podría comprender. Hay veces que me cuesta creer lo reducida que es la sección de la realidad que pueden sobrevivir, como sobreviven comprendiendo tan poco? Para mi sorpresa, no obstante, encuentro atractivos los sencillos placeres de sus vidas. No debo sucumbir a esa atracción. No me importa lo seductores que sean los recuerdos y las sensaciones de Anila. No me importa la pasión que siente por su marido y sus causas. Soy un Ángel de la muerte, y seré más que humano. Sé que tengo que permanecer en este cuerpo si quiero permanecer en este mundo, pero sus limitaciones son exasperantes. Esta mente no puede asimilar mis recuerdos, y a veces debo esforzarme para conservarlos. Admito que me tientan la vida de Anila y sus emociones. No se parecen a nada que haya experimentado antes. Tras milenios en el vacío frío el Infierno, cualquier sensación es bien recibida, pero no perderé lo que soy por una patética mujer humana cuyo espíritu fue roto en cualquier apartamento derruido. Soy un Demonio. Anila ha dejado de existir
Concepto[]
En Demonio: La Caída, los jugadores asumen el rol de los Elohim rebeldes, ángeles que desafiaron a su Creador por el amor de la humanidad, y que por su rebelión fueron exiliados al Abismo, una prisión oculta en lo profundo de las tierras de los muertos. Con el paso de los milenios, los Elohim han sido trastornados por su dolor, angustia y sufrimiento, manifestandose en forma de su Tormento, convirtiéndose en demonios en el verdadero sentido de la palabra.
Ahora, mientras una gran tormenta azota los reinos de la muerte, han aparecidos rupturas en los muros del Abismo, lo suficientemente pequeñas como para permitir a los Caídos más pequeños y débiles escapar. Luchando a la vez contra la fuerza de la tormenta y el tirón del Abismo, han logrado volver al mundo material.
La única forma que pueden permanecer allí, es tomando un huésped - de preferencia, un mortal cuya alma esté lo suficientemente débil como para permitir al Caído ganar posición. El alma mortal es lanzada a la tormenta, o enterrada en lo profundo de su cuerpo, dejando dominante al Caído.
El proceso de posesión expone al Elohim a los recuerdos del mortal. En la mayoría de los casos, esto no tiene efecto. Sin embargo, un minoritario grupo de Elohim descubrió profundas emociones humanas en sus huéspedes, sea amor, coraje, ambición, curiosidad o incluso rabia - algo lo suficientemente fuerte como para sacarlos de su Tormento, y recordarles aquel ángel que alguna vez fueron, aunque sea solo por un momento.
Estas memorias y emociones humanas sirven como salvador contra el Tormento, disminuyendo las memorias del Abismo, recuperando algo del semblante de cordura de los Elohim. Los jugadores comienzan como uno de esta minoría, aquellos con una segunda oportunidad gracias a las memorias de su huésped mortal. Sin embargo, lo que harán con ello, es otra historia...
Casas[]
Todos los Demonios pertenecen a una casa en particular. En un principio, la casa de cada ángel marcaba sus deberes, su propósito en el conjunto de la Creacion. Ahora las casas son divisiones básicas de distintos tipos de demonio que describen sus prioridades y talentos.
- -Diablos (Namaru): Carismáticos, tentadores y farsantes, capaces de pervertir las almas con sus palabras edulcoradas.
- -Azotes (Asharu): Portadores de la plaga y la pestilencia, capaces de sanar o herir con un simple toque.
- -Malefactores (Annunaki): Artesanos de los caídos, capaces de crear cualquier prodigio, por un precio.
- -Perversos (Neberu): Señores del destino que está escrito en los astros, dispensadores de pesadillas y maldiciones.
- -Corruptores (Lammasu): glamorosos cambiaformas, capaces de cambiar su aspecto para convertirse en el objeto de deseo de cualquiera.
- -Devoradores (Rabisu): Guerreros de los caídos, a cargo de las plantas y los animales.
- -Verdugos (Halaku): Atormentadores de los muertos, capaces de alzar espíritus y segar las almas vivas de sus cuerpos.
Facciones[]
En la antiguedad, los caídos coincidían en su respeto por la humanidad y la oposición a la tiranía del Cielo. Sin embargo, cuando la guerra se volvió inexorablemente en contra de la hueste rebelde, varios líderes influyentes comenzaron a cuestionar los ideales de Lucifer y el propósito de la lucha por la humanidad. Ahora que las puertas del Abismo han caído, los Demonios se sienten llamados a elegir bando entre estas facciones, cada una con sus propios planes para este mundo moderno.
- -Fáusticos: han observado el poder de la fe humana y han llegado a la conclusión de que incluso atrapados en este mundo, los Hijos de Adan tienen una chispa de poder Divino. Junta las suficientes chispas, y un día el fuego podría eclipsar al Sol. El mundo actual tiene toda su fe en las pruebas certeras de las cosas, algo que justamente no precisa fe. Los Faustians buscan devolver ese fuego a la humanidad, y posteriormente manejarla para su propios fines o para beneficio de la humanidad.
- -Crípticos: pasar incontables años prisionero en un lugar sin sonido, sin luz, sin sensaciones es un duro castigo. Pero provee una cosa: mucho tiempo para pensar. Luego del shock de la derrota, luego del horror y agonía del Infierno, incluso después de la desesperación de eones de vacío; algunos caídos dieron un paso atrás y comenzaron a reconsiderar sus asunciones iniciales. Han llegado a algunas premisas que dan lugar a nuevas preguntas, las cuales intentan responder para conocer su destino.
- -Luciferinos: no todos los espíritus en el Infierno perdieron la fe. No todos los ángeles caídos abandonaron sus esperanzas. Incluso en la derrota, algunos se mantuvieron firmes con sus principios, aquellos que los llevaron a la rebelión. Lealtad a la humanidad. Lealtad a Lucifer. Esta creencia los mantiene listos para luchar como lo estuvieron desde siempre, con la creencia de que Lucifer tiene, y tendrá, un rol principal en el mundo.
- -Voraces: enloquecidos, violentos y furiosos, así estaban muchos Elohim antes de perder la guerra. Antes de que les arrancaran la mayor parte de su poder. Antes de ser condenados a enloquecedor Infierno de aislamiento y pérdida por eones. Ahora, esos amargos e iracundos Elohim han surgido luego de un tormento de sufrimiento para ver un mundo corrupto y destruido, como han quedado ellos mismos. El panorama que vieron les dejó una sola opción: destruir. Destruirlo todo.
- -Reconciliadores: los ángeles son, por naturaleza, criaturas de virtud. Incluso los caídos recuerdan su incorrupta naturaleza. Mientras los Cryptics pensaban hacia afuera y al pasado, los Reconcilers lo hacían en su interior, y hacia el futuro. Si Dios es capaz de perdonar a la humanidad, tal vez pueda hacerlo con sus servidores caídos. Incluso si su castigo es eterno, la Tierra puede ser recuperada, para convertirse en un lugar glorioso y puro.
Saberes[]
Los Caídos poseían fabulosos poderes que les permitían manipular la Creación como les exigia su deber. Estos poderes se han debilitado considerablemente desde la Caída, pero los demonios siguen siendo capaces de utilizar el poder de la fe para obrar maravillas. Cada personaje demonio conoce un determinado Saber que refleja su contro sobre una de las facetas de la Creacion.
Fe[]
La Fe es la fuente del poder y la existencia de un demonio. En un principio reflejaba la fe en Dios y Su plan divino, pero ahora la fe del demonio es más bien una cuestión de confianza en sí mismo, fe en sus propias posibilidades y en la humanidad. La Fe mida cuanta influencia tiene el demonio sobre el tejido de la Creación, y una medida de la comprensión y el entendimiento del universo.
Tormento[]
El Tormento es el reverso de la Fe. Los Caídos se rebelaron y vieron cosas horribles en la larga guerra. Sufrieron todavía más durante el exilio de miles de años en el Abismo. Estas experiencias atormentan a todos los demonios, pervirtiendo y envenando sus almas. Algunos Caídos se rinden a su Tormento e intentan contagiar su sufrimiento. Otros se aferran a la rectitud que respetaban antaño y se esfuerzan por superar su amargura y su dolor.
Antagonistas[]
Los Caídos se enfrentan principalmente a dos grupos de antagonistas: mortales cazadores de demonios y los Encadenados. Los Señores de los Caídos conforman un tercer grupo, pero uno que no será tan importante en el juego. Vampiros, magos y cazadores son las tres facciones sobrenaturales con las cuales los Caídos se cruzarán más a menudo.
- Los cazadores de demonios pueden perseguir a los Caídos por una de dos razones: devolverlos al Abismo, o forzarlos a abandonar sus secretos y sus poderes.
- Los Encadenados son demonios que fueron conjurados del Abismo y recibieron relicuarios inanimados en lugar de huéspedes mortales para recidir, mayormente porque estos Caídos eran muy poderosos para la carne. Sin embargo, sin una consciencia humana para guiarlos, estos Caídos se convirtieron en monstruosidades más allá de cualquier Caído, y ahora siguen agendas dementes.